sábado, 25 de agosto de 2012

Mark Spitz

Sábado.

Reviso mi correo, miro tu nombre. Solo dices "Mark Spitz", luego, que me quieres. Un correo de cuatro palabras.


Cuatro palabras que entiendo perfecto.


miércoles, 22 de agosto de 2012

Guerreras

Yo también he tenido cuentas falsas, cuentas escondidas donde nadie sepa quién soy.
Meterte en la caparazón, no salir de la cueva.

Sonreír siempre, mientras todo alrededor se derrumba.

A las guerreras así nos toca. Nos caemos, lloramos, nos levantamos, nos limpiamos las rodillas, sonreímos mientras agarramos el armamento de nuevo y seguimos caminando. Solitarias. Nuestras armas y nosotras.

Al final es mejor así, mantener el anonimato mientras no logras confiar en nadie. Aunque la vida me ha hecho encontrar aunque sea un par de personas a las que les puedo contar cualquier cosa.

Duele, la confianza es frágil.....
.....El corazón también.

martes, 21 de agosto de 2012

Verano Fatal

Te vi en un escenario intentando disparar,
a este chico solitario no me tengo que acercar.
Tus ojos me encontraron en la última canción,
no sé si era una promesa o una premonición.

Te observo al descender y una extraña sensación después,
como poco a poco me voy empezando a encoger.
Llegando a la ciudad la mujer del tiempo nos dirá
que a una primavera en calma siempre le sucederá un verano fatal.

No tenemos que escondernos, alguien nos encontrará,
hacer siempre lo incorrecto es una forma de acertar.
La mañana nos recoge donde muere la ciudad,
yo buscando tu fuerza, y tú mi debilidad.

Te vuelvo a escuchar en esa forma especial de hablar,
para ser un buen cantante tienes que desafinar.
Hoy hace más calor y me tienes atrapado en tu rincón,
quién podría imaginar lo que nos iba a deparar un verano fatal.

Y aquí las noches llegan y nos pasan como un reactor,
y todo lo que nace, nace casi como por error,
y las gaviotas chillan que ya está cerca el final de un verano fatal.
De un verano fatal.

Te pierdo entre la gente que ha venido a celebrar
que llega el presidente y dice que nos va a salvar.
Veo pasos en la orilla y te vuelvo a encontrar 
en el agua de rodillas rezando hacia altamar.

Y hablamos del amor pero es la hora del adiós,
y hay un viejo que nos amenaza con su acordeón.
Y al huir de la ciudad la mujer del tiempo nos dirá,
que a un otoño desastroso siempre le precederá un verano fatal.


lunes, 20 de agosto de 2012

Desaparecida

Sé que no he escrito mucho. Me pasa muy seguido que abro un blog y lo dejo a medias.

Esta vez es por buenas noticias, creo. Estoy en una nueva etapa de mi vida, laboralmente hablando y me siento muy bien, pero también ha sido cansado. Estos últimos años, pareciera que el mundo se me vino encima, todo de un solo, y apenas empiezo a recoger los pedazos, cuando vuelven a caer más.

Además, viene mi cumpleaños y no me tiene muy contenta. El 2008 fue el último cumpleaños realmente feliz, a partir del 2009, ya ni ganas de celebrarlo me dan, y siempre pasa algo que me lo arruina. Es como que todo se juntara para decirme que no debería estar donde estoy, y que vuelva a ser libre y a disfrutar la vida.

Debo reconocer, que en los últimos meses, aunque me ha llovido sobre mojado, he aprendido a ser más yo. Sin reproches. Sin reprocharme yo y sin permitir que me reprochen nada. Siento bien. Siento rico poder hacer lo que me plazca sin importarme las puteadas de nadie, aunque sé que me falta mucho camino por recorrer.

Hoy, aunque estoy desaparecida, espero poder recoger todos los pedazos. Tomar los desórdenes que he reconocido en mi durante este tiempo y hacer algo bonito con ellos. Ordenarlos no. En el orden no hay movimiento, en el orden no siento que fluyo. Todo este desorden puede ser maravilloso tal cual es. Y lo acepto. Y lo quiero vivir así.

Mientras desaparezco, espero irme encontrando de nuevo.

martes, 7 de agosto de 2012

Pantalla

Es como seguir sosteniendo con una mano un mundo hecho pedazos. Querer sostener el agua de un río bravo, entre las dos manos, viendo como se escapa por mucho que se apriete.

Quisiera decirte que vamos a estar bien, que podemos seguir fingiendo que aquí no pasa nada y que somos perfectos. Así, perfectos como nos pintan. La recuerdo a ella, hablando de nosotros con palabras pomposas. "El mundo encontró un balance cuando ellos se juntaron" dijo. Eso lo dijo hace menos de una semana.

Y sí, muchos suspiraban tanto que al vernos se consiguieron una pareja. A algunos les fue mal como a nosotros y la pareja que se consiguieron los mantiene bajo régimen militar.... y así, van a durar más de lo que nosotros planificamos para nuestra vida juntos.

Lo que no está bajo la vista del público, es la sutileza de tu desprecio. Vivimos creyendo que no se está maltratando a otra persona si no le estás pegando. Creemos que mientras nos digan palabras bonitas y nos tengan un lindo sobrenombre que a todos causa ternura, nos están tratando bien. Guardas todos esos rencores y reproches en tu corazón de niño pre-adolescente. No soportás la vida adulta que te hiciste, pero te aferrás a ella porque es la mejor salida que encontraste.

Mientras todos se derriten dentro de ese molde perfecto que armamos obligados, yo hoy lo rompo. Soy cauce. Soy agua que se mueve. Soy tormenta que destruye. Soy furia. Aún al desembocar sigo mi rumbo. Exploto porque nunca he querido conformarme. Confieso que me importa, me asusta y me duele más lo que diga la gente y lo que vayan a pensar, porque mi mamá se encargó de enseñarme que hay que cuidar lo que habla la gente.

Hace cuatro horas, miraba la tele abrazada a ti. Ahora, no puedo dejar de llorar. Nos vamos. Esta es la etapa final. (O al menos eso esperamos los dos).

Me pongo una armadura... para mientras sin que te des cuenta sigo llorando y pienso cuánto voy a extrañar las risas y la ternura.

sábado, 4 de agosto de 2012

Agosto (4 días tarde)

Empecé el mes de la mejor manera, y aunque la depresión no se va, pinta a ser un bonito mes.

Ah, se me olvidaba: no quiero que se acabe. No quiero cumplir años.


jueves, 2 de agosto de 2012

Con el mundo encima

Caminar sobre la capa más delgada del hielo, siempre.
Querer soltar todo a la vez, hasta que la capa se rompa y no importe nada más.

Hundirte.... el mundo que llevás encima no te deja salir a la superficie.

La paz. El peso ya no se siente. Vas ligera. Sos liviana.

Sos libre.