Alicia ve en el espejo todas esas cosas en las que no quiere convertirse.
Se ve familiar, perdida, fuerte, perdida.

Cada día te recuerdo, bomba de tiempo en mi pecho.
Somos erizos que huyen, gatos pardos en la noche.
Alicia me reconoce y cada vez más, me reconozco en ella.

Quiero quitarte la espina del corazón, Alicia.
Dejate querer.
Dejá de explotar aquí adentro.